By
Ariana Díaz Celma

Las dark kitchens proliferan. Si hace poco más de un año descubríamos algunos de los primeros casos por esta latitud, la idiosincrasia actual y el estado de alarma derivado de la pandemia mundial han convertido este modelo de negocio en uno de los más fiables. El planteamiento es sencillo: se trata de cocinas sin ubicación conocida que sirven exclusivamente para ejecutar el formato delivery. Si a esta aura de misterio le sumamos un packaging canalla y kilos de pizza –la mejor de las comidas para degustar en casa, no nos engañemos–, el resultado es redondo. Traficantes de Harina es la nueva pizzería clandestina de Barcelona, que juega a comerciar con este preciado polvo blanco en formato gourmet. F: Todas las imágenes cortesía de Traficantes de Harina

Tras el proyecto Traficantes de Harina encontramos a los capos Leo ​Chechelnitzkiy​ y Martín Pimentel, dos pesos pesados de la comida informal de calidad en Barcelona

Tras el proyecto Traficantes de Harina encontramos a los capos Leo Chechelnitzkiy​ ​(Babula Bar 1937 y Sasha Bar – No Hay Mañana) ​y Martín Pimentel ​(V de Vermut), dos pesos pesados de la comida informal de calidad en Barcelona, que han ideado esta pizzería solo disponible a través del delivery​ para contentar a los sibaritas de la pizza que no quieran moverse del sofá. Todo envuelto en una gráfica con guiños constantes a la cultura urbana y pop a través de iconos como Andy Warhol, Barbara Kruger o David Hockney; con referentes del cine y las series como Heisenberg de Breaking Bad, Charlie Cheese, Pulp Fiction o Kill Bill; mitos de la industria musical como Mick Jagger, Freddie Mercury o Amy Winehouse; y mafiosos como Al Capone, Bonnie Parker o Pablo Escobar.

© Traficantes de Harina

Precisamente éstos últimos ponen nombre a algunas de las pizzas de su escueta y sabrosa carta, que a menudo cuenta con combinaciones poco comunes y sorprendentes al paladar. Tómese como ejemplo El Patrón, con mozzarella fior di late, tomate natural, costilla de cerdo desmechada, panceta ibérica, huevo, pimentón de la vera dulce y salsa michelada; o la Sito Miñanco, con mozzarella fior di late, tomate natural, jamón dulce, patata al horno, puerro y salsa brava. Freddy Mercury da nombre a otro de los hits de la carta a base de mozzarella, gorgonzola, cecina de vaca vieja curada, edamame, mezcla de frutos secos y miel; mientras que David Hockney encarna una jugosa masa aderezada con tomate natural, cecina de vaca vieja curada, berenjenas, burrata de Puglia, parmesano, tomate semiseco y pesto genovese.

Todas las pizzas están elaboradas con harinas blancas e integrales, molidas a piedra y fermentadas durante 24 horas

Todas las pizzas están elaboradas con harinas blancas e integrales, molidas a piedra y con agua mineral de baja mineralización, con una masa que se fermenta durante 24 horas. A una masa como ésta solo pueden acompañarla ingredientes frescos que vienen directos de proveedores de proximidad, excepto productos como la mozzarella, que viene de Campania, o la burrata, de Puglia, como manda la biblia pizzera. Además, nos han soplado que los pizzaiolos de Traficantes de Harina preparan la masa, la aplanan y entonces la abren con las manos para que el aire no se escape, manteniendo así los bordes con los alveolos tan característicos de una buena mandanga.

Además de pizzas blancas y rojas, la carta cuenta con entrantes que nadan entre el tex-mex y las referencias al food porn americano, como la ensalada de col o las alitas de pollo. El postre viene de la mano de los helados de Delacrem, un combo perfecto que culmina con cinco cócteles entre los que destacamos la michelada, que te llegará a casa con las instrucciones necesarias para culminar su preparación y lograr ese punto perfecto.

El delivery de la mejor materia prima ronda entre los 15/20€ por persona.

  • Horario: L-M: Cerrado | MX-J: 18:00-23:30h | V-S: 18:00-00:00h ! D: 18:00-23:30h
  • Teléfono: (+34) 687 238 766
  • Tipo: Restaurante
  • Web: https://traficantesdeharina.com/