Ya iba siendo hora de dedicar hotspot al ¿mejor? italiano de Barcelona. Exacto, la crew de good2b ha estado a menudo tentada de coronar el lugar como el líder indiscutible de su especie. Por el espacio -como si de una entreñable tienda de comestibles se tratara, aunque con un encantador punto decandente-, por su fantástico servicio pero, sobre todo, por su excelente comida italiana. La historia empieza como otras tantas. Pietro Leonetti, alma máter del espacio, empezó a practicar las recetas de su nonna y su mamma cuando, circa 2002, se dedicaba a organizar cenas para sus colegas universitarios. Pronto esta afición se convertiría en su profesión dentro de las fronteras de su coqueto imperio: Le Cucine Mandarosso.

Lo mejor de su cocina es, precisamente, que escapa de los tópicos de la clásica imagen italiana. No sirven pizza y la decoración no remite a la típica trattoria, sino que se centra en el buen gusto, sin desentonar un ápice con el barrio en el que se encuentra, La Rivera. Toda su carta es intachable aunque, si por algo se ha popularizado el lugar, es por su impecable menú de mediodía por 11 euros, que permite escoger una pasta ‘asciutta’ -encontrarás una amplia selección con distintas salsas y otras variedades al horno-, uno de sus postres -atención a la panacota y al merengue sobre base de lemon pie- y que incluye una bebida. Eso sí, si te encaprichas de una Aperol, una gran cerveza italiana, tendrás que pagar un extra que bien vale la pena. Otro de sus puntos fuertes es el clásico aperitivo italiano que tiene lugar en Le Cucine cada domingo a partir de las 20:30 horas. 

A la hora de cenar, su carta cambia cada día. Siempre cuenta con seis platos principales, de los cuales cinco son de pasta y otro varía entre carne o pescado. Los antipasti, por su parte, siempre acostumbran a ser recetas cocinadas bajo alguna receta napolitana, así como quesos como la burrata, la mozzarella di bufala, la provola affumicata o la stracciatella pugliese -lo mejor, bajo nuestro punto de vista-. Los postres, una vez más, vienen de la mano de la repostera del lugar y son imperdibles desde el primero y hasta el último de la lista. Cenar te costará por alrededor de 20-25 euros. El común denominador de todos sus platos es el hecho de que toda la materia prima procede directamente de Italia, ya sea con la pasta Setaro, con la salsa de tomate Annalisa o con el café Illy. 

¡Ah! Recomendamos reservar porque el lugar se pone hasta los topes…