Si este año te encuentras verdaderamente perdido en la elección de regalos para tus familiares y amigos, googlea el nombre de Helen Levi y deja que tus retinas no puedan salir de su asombro. Ante ti se abrirá un maravilloso y ensoñador universo cerámico. Avisamos, resulta imposible que exista persona en este mundo a la que no le pueda gustar las creaciones de esta ceramista y fotógrafa neoyorquina.

Es imposible que exista alguna persona en este mundo que no le puedan gustar las creaciones de esta ceramista neoyorquina

En su inspirador estudio de Brooklyn, Helen Levi deja volar su imaginación poniéndola al servicio de la cerámica. Creaciones únicas, con una marcada personalidad, que envía después a todo el mundo. Su elenco va desde la realización de piezas utilitarias para el hogar como maceteros, candelabros, floreros, vasijas y juegos de mesa completos, hasta joyería o esculturas. En cualquiera de sus variedades consigue dotar los objetos de una belleza muy original. Formas clásicas que combina con un exquisito uso del color, acaban conviertiendo sus propuestas en verdaderas obras de arte.

Resulta muy complicado pensar que la cerámica comenzó siendo para Helen Levi un mero pasatiempo. Una actividad que llevaba a cabo en sus ratos libres entre trabajos de media jornada como camarera o asistente de foto. Viendo sus creaciones, uno se da cuenta que sus manos ciertamente han venido a este mundo a moldear, tornear y esculpir, y su cabeza a imaginar objetos increíbles. Pasar por su web es encontrarse con caramelos cerámicos ineludibles con los que picarás seguro, pero con la tranquilidad de que te llevarás una verdadera joya.