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Bru Romero

Cuando hablamos de ir a comer fuera, siempre pensamos dónde hacen la mejor carne, en qué lugar ofrecen el mejor pescado o incluso el último local donde probamos el mejor marisco, pero ¿alguna vez pensaste en hacer reserva en un restaurante cuyo único menú girara en torno a vegetales y hongos?

Situado a 40 minutos de Madrid, en Collado Mediano para ser más exactos, el reconocido chef Rodrigo de la Calle desarrolla su pasión gastrobotánica en El Invernadero, un pequeño espacio acristalado con cuatro mesas donde, a través de una única propuesta de degustación, emplaza al comensal a una experiencia totalmente diferente (y absolutamente healthy). Una cocina verde donde el único límite es la temporada y donde la proteína animal es un mero sazonador (aún así, dan opciones de carnes y quesos).

En El Invernadero de De la Calle encontrarás más de 70 tipos de vegetales mezclados en una veintena de suculentas propuestas

Una cocina diferente y sumergida de pleno en los vegetales, las algas, las hierbas aromáticas, raíces y tubérculos ligadas con frutas fermentadas y jugos de hortalizas. Una absoluta revolución verde sobre la mesa que ofrece ese twist culinario tan necesario que demuestra que no solo de carne y pescado vive el hombre.

Encuentra, por tanto, Rodrigo de la Calle su particular embajada en la sierra de Madrid y en un enclave tan adecuado como ese pequeño palacete del siglo XIX que responde al nombre de La Torre Box Art Hotel, que tanto rollo le da al moderno bloque de paredes de cristal. Un destino indicado para aquellos que no se conforman con lo de siempre y que movidos por su impulso más cañero, no dudan en entregarse al servicio de este domesticador de vegetales, alumno de Martín Berasategui y Jöel Robuchon, ‘Cocinero Revelación’ en 2009 por la crítica española, estrella Michelín y legítimo revolucionario de la huerta que hará que las verduras retomen el protagonismo que jamás debieron perder.

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