Casey Gray es un artista de San Francisco que usa el aerosol para crear pinturas vitalistas donde las imágenes más mundanas y cotidianas de nuestro día a día, se transforman en vívidos mosaicos de colores.

Casey atribuye el uso del aerosol debido a su capacidad de transmitir una sensación bidimensional en la pintura

Podría decirse que sigue la tradición pop de tomar lo mundano y banal para reconvertirlo en una obra de arte, pero su estilo pictórico tiene además mucho que ver con el hiperrealismo e incluso el arte digital. Aunque el uso del spray como medio, también nos habla de cierta afinidad con el arte urbano debido a que esta técnica aún no está muy extendida en el mundo del fine art. Ciertamente no es muy común encontrar artistas que usen el spray para crear pinturas de un carácter tan definido y detallado. De hecho, para su más reciente serie de pinturas, el artista ha usado una marca de aerosol especial llamada Montana Gold Spray, que está diseñada especialmente para realizar obras pictóricas.

Casey atribuye el uso del aerosol debido a su capacidad de transmitir una sensación bidimensional en la pintura, ya que, según él, de esta forma puede emular la apariencia plana de la plataforma digital, el mundo de cuya imaginería y discurso bebe la obra del californiano.

Podríamos decir por ello que sus pinturas podrían ser una suerte de bodegones del siglo XXI: los objetos banales a los que tradicionalmente hemos estado expuestos, han cambiado de tal forma que la práctica del arte pop en la actualidad pasa por la apropiación de imágenes y símbolos provenientes de internet. Casey Gray parece querer captar todas aquellas imágenes que pululan en Google Images, sin aparentemente aplicar mucho filtro, para condensarlas y ensamblar sus naturalezas muertas, valiéndose de lo random y apropiándose de imágenes a priori inconexas y descontextualizadas. En definitiva, un universo con sus propias claves narrativas, en los que la ironía y el humor nunca faltan.