By
Sandra Mercadé
BALENCIAGA-COUTURE

Hace ya 52 años desde que Cristóbal Balenciaga cerró la puerta de su taller para dar paso al sistema del pret à porter. Sin embargo, su reconocida firma homónima, actualmente propiedad del conglomerado de lujo Kering, ha decidido regresar a la Alta Costura. Un viaje a los orígenes de la marca que culminará con una nueva colección que se presentará este julio de 2020 en el marco de la Semana de la Alta Costura de ParísF: Detalle del interior del antiguo atelier de Cristóbal Balenciaga en París. © Thomas Kublin/Cortesía de Balenciaga

50 años después, Balenciaga vuelve a sus orígenes y regresa a la Alta Costura con una nueva colección que presentará en julio de 2020

«La alta costura es la base de esta casa, así que es mi deber creativo y visionario traer de vuelta la alta costura», afirmaba en un comunicado de prensa reciente Demna Gvasalia, el actual director creativo de Balenciaga. Y añadía: «Para mí, la alta costura es un modo inexplorado de libertad creativa y una plataforma para la innovación. No solo ofrece otro espectro de posibilidades en la confección, también trae la visión moderna de Balenciaga a sus fuentes de origen». El pasado septiembre, el diseñador georgiano abandonó la dirección de su propia marca, Vêtements, para canalizar sus esfuerzos íntegramente en la histórica firma. “Esta experiencia me permitirá asociar mi visión creativa moderna con el savoir-faire original de la maison”, concluía.

En 2015 Gvasalia le tomó el relevo a Alexander Wang en la dirección creativa de la marca. Desde que el georgiano cogió las riendas de Balenciaga le inyectó su propia visión: un nuevo enfoque cargado de modernidad con propuestas rompedoras e innovadoras de estilo urbano. El fundador de Vêtements encarna la voz de las nuevas generaciones que dejaron de regirse por los viejos parámetros del lujo.

Para hacer posible la colección, Balenciaga ha reclutado a un equipo y un atelier enteramente dedicado a la alta costura. Además, está recreando los salones originales de costura en su histórica ubicación parisina, el número 10 de la avenida George V, donde Cristóbal Balenciaga instaló su firma cuando trasladó su negocio a París en 1937. Con el regreso a la alta costura, Balenciaga difumina los límites temporales de su propia historia, vinculando su presente con su pasado. Desde aquí, esperamos con emoción a que llegue julio.