By
Ariana Díaz Celma

Alba Galocha (Santiago de Compostela, 1990) estudió diseño de moda, pero pronto se dio cuenta de que lo suyo estaba al final de la cadena de producción. En la sección modelos, para ser exactos, un hecho que se constató cuando en 2012 ganó el premio a Mejor Modelo en la Mercedes Benz Fashion Week de Madrid. Hoy en día las fashion weeks se la rifan y las firmas apuestan fuerte por tenerla como imagen. Empezó de forma tímida con Malababa, pero ya ha trabajado con otros más grandes como Pull&Bear, Adolfo Domínguez o El Corte Inglés. Combina su trabajo como modelo con el de periodista de moda en el blog Tea Time de Vogue. Estuvimos con ella en la inauguración de la nueva tienda de Aristocrazy en Paseo de Gracia con Consell de Cent. Su mirada dulce y un look muy a lo TomBoy nos merecieron una buenísima impresión de esta gallega aunque madrileña de adopción.

Eres portada del segundo disco de Novedades Carminha. ¿Cómo una de las modelos más buscadas del momento termina siendo imagen de un grupo underground?

Cuando hice la fotos ya había empezado a trabajar como modelo, aunque era el principio. Son amigos míos desde hace tiempo y, si me lo preguntaran de nuevo, volvería a aceptar.

Parece que tu vida se divide entre el indie más rotundo y el glamour de las pasarelas más mainstream…

Hay que saber estar en todas partes. Me gusta igual un concierto de Novedades Carminha que uno de Beyoncé. Es cuestión de ir con distinta filosofía aunque con una misma finalidad: vas a pasarlo bien.

Sabemos que debes tener pocos pero ¿cómo es un día habitual en la vida de Alba Galocha?

Si no viajo es como el de cualquier otra persona, me levanto, miro qué pasa por la red, trabajo, intento hacer algo de deporte y vuelvo a casa.

Pero imaginamos que esto no sucede muy a menudo…

Depende de la temporada. He llegado a coger dos vuelos al día en 21 jornadas consecutivas. Eso sí fue una locura.

Para muchos coger un avión es una actividad relacionada al hecho de irse de vacaciones. ¿Cómo te sientes cuando coges uno para descansar?

No lo había pensado nunca. Pero te puedo asegurar que cuando voy de vacaciones te sientes muy diferente a cuando vas a trabajar (risas).

¿Prefieres la pasarela o la fotografía?

Para mí trabajar en fotografía es siempre algo mucho más bonito y con mucha más historia detrás. Además, a nivel modelo hay mucho más que contar y tienes una relación mucho más estrecha con el fotógrafo. No obstante, desfilar también me gusta.

Aunque de forma sutil, puede que seas una de las modelos más tatuadas…

Sí, mi primer tatuaje es mi nombre en árabe y aún lo conservo.

¿Te has arrepentido de alguno?

De una letra china, era feísimo y me lo borré.

Tienes también tatuada una bolsa de te con el logo de tu blog Tea Time en Vogue. ¿Qué vino antes?

El blog, el tatuaje lo hice después.

Tus prendas fetiche son…

Botas de estilo masculino, jeans negros, una camisa blanca y un trench.

Tienes un estilo muy definido. ¿Quiénes son tus iconos de estilo?

Me gusta gente muy distinta, de Kate Moss a Nicolas Ghesquière y de Annie Hall a Cat Power.

Tus hotspots favoritos son…

El restaurante Fatigas del Querer (C/de la Cruz, 17), los Cines Ideal (C/del Doctor Cortezo, 6) que creo que tienen las pantallas más pequeñas de Madrid y Panta Rhei (C/Hernán Cortés, 7).

Prohibirías…

Las medias de cristal.

No puedes parar de escuchar en modo repeat…

Jungle.

Nunca pensabas que terminarías…

Pues no hay nada que nunca pensé que no iba a hacer, no me pongo barreras.

Para ti ser good2b es…

Ser natural.

*Foto por Cecilia Díaz Betz